El papel maché es para mí, la mágica
transformación de un objeto plano a una figura tridimensional. La ligereza de
esta técnica me permite llevar la obra al límite de las leyes físicas,
apoyando, en ocasiones, toda una pieza en un solo punto. Me gusta utilizar objetos
y materiales en desuso, porque tienen la fuerza de su propia historia y me
invitan a darles una nueva utilidad.
Con mis esculturas busco plasmar la belleza
del mundo en sus líneas y volúmenes. Mis figuras, en su mayoría alargadas y
torcidas, se inspiran en la estética del cuerpo humano y en la fuerza, las formas
y los colores del reino animal.
Me apasiona capturar el movimiento a través
de las expresiones de los rostros y la tensión en los cuerpos. Espero que en
mis piezas se descubra algo nuevo cada vez que se contemplen y que logren
generar la sensación de que están a punto de moverse.